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Depresión en Niños, ¿realmente existe?

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Podría parecer una enfermedad de adultos, sin embargo también puede presentarse en niños y sobre todo en adolescentes,  durante y después de la pandemia por COVID 19 esto empeoró.

Aproximadamente 2 de cada 100 niños, menores de 12 años, sufren depresión. Entre los adolescentes, esta cifra aumenta a 5 de cada 100. Todos los niños se sienten a veces tristes o abatidos, pueden tener frustraciones que los tengan cabizbajos pero estos sentimientos no son duraderos, normalmente un niño olvida pronto el problema y se entusiasma con otra cosa. 

Se considera que un niño está deprimido si el sentimiento de tristeza persiste durante dos semanas o más. La depresión puede provocar tristeza y abatimiento en el niño durante un periodo prolongado de tiempo y puede llegar a interferir con su vida. Es posible que al niño todo le resulte complicado y, en los casos graves, puede llegar a tener pensamientos suicidas. 

En términos generales se puede hablar de tres tipos de depresión.

Depresión leve.

La depresión leve provoca que el niño se sienta infeliz, pero no le impide llevar una vida normal. Es posible que le suponga un esfuerzo llevar a cabo las tareas cotidianas y no les vea mucho sentido. Con unos pequeños cambios en el estilo de vida ( cambio de horarios, dormir mas, hablar con la escuela, hablar con amigos o algún familiar), puede recuperarse de la depresión leve.

Depresión moderada

La depresión moderada repercute de forma considerable en la vida del menor. Puede causar una sensación constante de abatimiento y tristeza, como papás pueden darse cuenta por que las calificaciones bajan, no se quiere bañar, no quiere salir a jugar con los amigos o ir a reuniones sociales. En este caso, el niño debe visitar a su médico, ya que es poco probable que los cambios en el estilo de vida ayuden a resolver el problema.

Depresión mayor

Si el niño se siente incapaz de enfrentarse a la vida diaria y tiene pensamientos negativos constantemente, es posible que padezca una depresión mayor. Esta enfermedad supone una amenaza para su vida, ya que podría intentar suicidarse, por lo que es importante acudir al médico de inmediato.

Síntomas de la depresión

Los síntomas de la depresión varían de una persona a otra, también puede variar según la edad del niño. A veces puede resultar difícil determinar si aquellos que muestra un joven son los característicos del desarrollo en la adolescencia o si se trata de depresión. A continuación, enumeramos algunos de los síntomas más habituales de la depresión:

  • Sentimientos de desesperación e impotencia.
  • Episodios frecuentes de llanto.
  • Sensación de infelicidad la mayor parte del día.
  • Falta de autoestima y poco interés por ver a los amigos o familiares.
  • Dificultades para dormir.
  • Cansancio o falta de energía.
  • Dificultad para concentrarse.
  • Pérdida de confianza.
  • Cambios en los patrones alimentarios.
  • Dolores sin causa aparente.
  • Pensamientos sobre la muerte o el suicidio.
  • El tipo y el número de síntomas que mostrará el niño dependerán, si tiene una depresión leve o mayor. Si tu hijo presenta alguno de los síntomas antes enumerado y te preocupa que pueda sufrir una depresión, conversa con tu médico.

El médico debe descartar primero algo orgánico, es decir físico. Un desbalance en la glándula tiroidea podría dar síntomas parecidos a una depresión.

Si notas algún cambio en tu hija o hijo primero acude al médico quien te podrá decir que pasos seguir.

Como mamá te quiero compartir algo que me ha servido mucho, imagina que los adolescentes son como ostras. A veces están abiertas y dispuestas a comunicarse contigo y escuchar lo que tengas que decir, pero a veces están cerradas y aunque trates de decir algo la información no les llega. Ten paciencia y ponte muy atent@ y cuando abra su concha comunícate. Esto te evitará problemas, peleas y que tu adolescente (su concha) se mantenga cada vez más tiempo cerrado.

Recuerda disfrutar a tus hijos y mantén mucha comunicación con ellos, más que nada y sobre todo con los adolescentes, muéstrate disponible para platicar cuando ellos lo necesiten.

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