A los papás siempre les ha ocasionado preocupación buscar los zapatos que permitan el mejor desarrollo del pie, sobre todo si son los primeros zapatos que le compran a su hij@.
Hay muchos mitos y costumbres sobre este tema pero existen numerosos estudios científicos donde vigilan y comparan durante varios años a grandes grupos de niños que usaban tenis, zapatos ortopédicos (suela dura, botita y rígidos) o que caminaban descalzos.
Después de varios años de seguimiento encontraron que no había diferencia significativa entre los grupos, que quiere decir esto, que el mismo porcentaje de niños en los tres grupos , al final del tiempo de vigilancia, tienen pie plano u otras alteraciones que los zapatos ortopédicos no pudieron evitar.
Se sabe ahora que los pies siguen modificándose durante los primeros años de vida, por lo que es importante que se ejerciten adecuadamente y puedan moverse libremente.
- 1. Ligeros: Los zapatos no deben de pesar ya que eso entorpece la marcha del niño y lo puede cansar.
- 2. Suela antiderrapante: Es importante para evitar accidentes y darles seguridad al caminar.
- 3. Suela flexible: los zapatos deben de permitir que el niño pueda doblar la planta del pie y así ejercitar los músculos que forman el arco.
- 4. Deben de permitir la flexión del tobillo: también para fortalecer los músculos y tendones del tobillo.
- 5. Fáciles de poner y quitar: Es más práctico, el niño puede aprender a ponerlos y quitarlos solo, además de que evitamos posibles lesiones al manipular el pie para querer ponerlos.
Existen muchas marcas de zapatos con estas características, incluso hay unos calcetines con suela de goma que al inicio , cuando están aprendiendo a caminar, podrían funcionar.
Espero que ahora puedan comprar los mejores zapatos para sus hijos.