Los ciclos o ritmos son cambios físicos, mentales y conductuales que experimentamos repetidamente en 24 horas, en días o en el mes, y que dependen de reacciones a la luz, la oscuridad, el sonido y la actividad física, entre otras cosas.
Estos ciclos nos brindan salud y nos hacen sentir muy bien, siempre y cuando los respetemos.
Si viviéramos en un mundo sin luz artificial ni tecnología, cuando el sol se ocultara nos daría sueño, ya que la luz tenue y color rojizo libera en nuestro cerebro una sustancia llamada melatonina que nos ayuda a disminuir el cortisol y así poder descansar y recuperarnos. En la mañana, al salir el sol, los tonos del amanecer hacen que el cortisol se eleve en la sangre y nos sintamos listos y energizados para enfrentarnos a un nuevo día. Este es el ciclo circadiano de sueño-vigilia.
Por las mañanas, cuando los pájaros cantan, nuestro sistema nervioso despierta con los tonos musicales y liberamos oxitocina y serotonina, lo que nos hace sentir bien.
Otro ejemplo de los ciclos que tiene el cuerpo es la manera en que respiramos por la nariz. Cíclicamente alternamos los lados de la nariz; los cornetes, unas protuberancias dentro de la nariz que nos ayudan a limpiar y calentar el aire que inspiramos, se inflaman de manera que unas horas respiramos mejor con la narina derecha y luego unas horas con la izquierda. Esto beneficia mantener una presión adecuada en los huecos de la cara y aumenta la percepción de olores.
Otro ciclo muy importante en las mujeres es el ciclo menstrual, que dura aproximadamente 28-30 días. Las hormonas suben y bajan según las etapas del ciclo, incluyendo la menstruación y la ovulación. Esto se ve influenciado por la alimentación, el ejercicio y el estrés.
Mantener un buen ciclo de sueño-vigilia hace que todos los demás ciclos sean más fáciles de mantener en equilibrio.
Escuchemos a nuestro cuerpo y respetemos en la medida de lo posible nuestros diferentes ciclos, así aumentaremos la secreción de melatonina, oxitocina, serotonina, dopamina y controlaremos el cortisol.
¡Disfruten a sus hijos!
