Estoy en el congreso de Medical Board y quiero compartir con ustedes lo que me pareció importante de la plática sobre fiebre que impartió la doctora Esse Menson de Inglaterra.
Cuando nuestro hijo presenta fiebre todos los papás sentimos una necesidad inminente de bajarla lo antes posible. El la plática la Dra. Mason nos presentó casos de infecciones las cuales se complicaron por el uso de medicinas para bajar la fiebre.
La fiebre es un signo que nos avisa cómo va la evolución del cuadro infeccioso, si damos medicina no nos podemos percatar si la infección se está controlando o está empeorando por qué oculta síntomas.
Por otro lado está bien comprobado que la fiebre ayuda a controlar las infecciones, estadísticamente los pacientes que usaron antipiréticos (medicinas para bajar fiebre) se complicaron más.
Otro punto importante es que al usar medicinas para controlar la fiebre debemos entender que lo que se busca y se espera es que la temperatura baje uno o dos grados, es decir que de 40 grados centígrados bajara a 39 o 38, y con eso estaría bien.
No podemos querer siempre que llegue a 36.5, esto induce el uso de más medicamentos o combinaciones de medicamentos incrementando los efectos secundarios de estos y poniendo en riesgo al niño.
A las conclusiones que llegó la Dra. En su plática fueron que:
- Usemos antipiréticos solo si la fiebre pone incómodo al niño.
- No tenemos que bajar la temperatura hasta 36-37, con que baje uno o dos grados es suficiente.
- No usar demasiados medicamentos que pudieran dañar más que ayudar.
- Recordar que el uso de antipiréticos oculta signos y síntomas y esto no nos ayuda a detectar complicaciones médicas.
Espero que esta información sea de utilidad para ustedes.
